Dolor. 1). Sensación molesta y aflictiva de una parte del cuerpo por causa interior o exterior. 2) Sentimiento de pena y congoja. Real. Que tiene existencia objetiva.
"Lo más importante en la comunicación es escuchar lo que no se está diciendo," Peter F. Drucker
El primer impacto fue silencioso.
"Un dolor real" estrenó a principios de 2024 en el Festival de Sundance. Fue adquirida por 10 millones de dólares para su distribución; sólo costó tres. Como una seria contendiente durante la temporada de premios comenzó a en el último par de meses del año. Es una competidora silenciosa, quizás inesperada, pero muy gratificante.
Es el viaje de David (Jesse Eisenberg) y Benji (Kieran Culkin), primos treintones que crecieron juntos, quienes se han distanciado un poco porque "la vida" y ahora se embarcan en un viaje a Polonia para conectar con su legado. Los Kaplan hacen el viaje en un tour que dejarán para visitar la que fuera casa de su abuela, quién recién falleció. David y Jesse son muy distintos. David tiene un trabajo estable, es reservado, está casado y es padre de una niña. Benji no tiene un empleo, es libre pensador, hablador y espíritu.
Jesse Eisenberg tiene su segunda oportunidad como director con "Un dolor real". Su ópera prima fue "Cuando termines de salvar el mundo" de 2022, también un título independiente que obtuvo buenas críticas, pero pasó un tanto por debajo del radar. Eisenber es conocido por sus roles en comedias como "Zombieland" o por roles de corte neurótico como el que le valió su nominación al Oscar al darle vida a Mark Zuckerber, creador de Facebook, en "Red Social". Eisenberg es también guionista y "Un dolor real" es un trabajo muy personal para él. Es judío, de ascendencia polaca y ha declarado que entre sus búsquedas está el reconciliar su trauma histórico (venir de una familia que vivió el Holocausto) con sus retos actuales. "Un dolor real" le permite hacerlo.
Entre los filmes de la temporada de premios, "Un dolor real" está en la línea de "Anora" en el sentido en que es, en apariencia, sencillo y en que es una comedia, mejor dicho, una tragicomedia. Ahí terminan, desde luego, las coincidencias. Es una buddy comedy y es un trabajo que se va desdoblando y que va profundizando en sus temas conforme el viaje avanza.
Una de las grandes fortalezas de "Un viaje real" es su guion. Es muy probablemente una de las categorías en las que sea incluido en el Oscar y quizás donde tiene mejores posibilidades. En él, David y Benji aparecen como dos primos más, es fácil de apreciar el cariño y la complicidad, pero también que el tiempo y la distancia han construidos silencios que guardan verdades, celos y hasta envidia. En cierta manera David y Benji son opuestos que tienen lo que al otro le falta. A David la espontaneidad y libertad de Benji, a Benji la estabilidad de David.
El guion entiende muy bien que el diálogo importante (y el de "Un dolor real" es muy divertido y ocurrente con frases como "Estamos en un tour del Holocausto. Si este no es el momento para llorar, no sé qué decirte" o "nuestra abuela era de aquí, así que Dave organizó que nos uniéramos a esta gira geriátrica polaca con ustedes, gente maravillosa"), pero entiende aún mejor que el cine está en los detalles porque los detalles dicen lo que los diálogos no alcanzar. Y el detalle es tan sutil como hermoso y verdadero en "Un dolor real". Está desde el inicio, en el aeropuerto donde todo comienza, con Dave apurado para llegar a tiempo y enviándole mensajes de voz a Benji para prevenirlo del tráfico y con Benji habiendo llegado muchas horas antes porque "le gusta ver gente" y porque "no tenía más que hacer". El detalle está en el vestir estándar de David y el de "caja fuerte" de Benji, sin nada que combine, porque lo último en lo que piensa es en eso, como no pensó en llevar calcetines u otro par de tenis, pero sí observa que los pies de David son como los de la abuela. El diablo está en los detalles, dicen.
Podría decirse que "Un dolor real", es, a su manera, una película de la Segunda Guerra Mundial, aunque más en la línea de aquellas que la abordan desde las generaciones posteriores, un poco como lo hace, aunque con menos distancia, "Una pasión secreta" de Stephen Daldry. De hecho, "Un dolor real" comparte con otra de las películas de la temporada, "La lección de piano", uno de sus temas centrales, el legado. ¿Qué se hace con esa herencia? ¿Qué se hace con aquello que precede y que no es tangible (aunque pudiera estar materializado de alguna manera)? ¿Cómo se le honra sin que pese ni estorbe, sin que se le olvide?
El tour de Dave y Benji está conformado por James (Will Sharpe), el guía, fascinado por la historia y preocupado por tratarla con respeto; Marcia (Jennifer Grey), en situación similar a la de los primos; Diane (Liza Sadovy) y Mark (Daniel Oreskes), un matrimonio que busca respuestas y Eloge (Kurt Egyiawan), un negro convertido al judaísmo que encontró en la religión similitudes con su propio legado. Es un grupo heterogéneo al que une el judaísmo de distintas maneras, pero cada uno tiene una experiencia distinta con él. Es un crisol que crea un ambiente adecuado para la comedia, pero también para el diálogo y la reflexión.
El guion funciona porque Jesse Eisenberg sabe cómo dirigir a los actores y, en especial, gracias a su química con Kieran Culkin. Si bien Eisenberg es el protagonista, bien podría argumentarse que Culkin es un coprotagonista y no un actor de reparto como está siendo promovido en la temporada de premios. Es una cuestión de estrategia que ha colocado a Culkin como el favorito en la categoría y como el que posiblemente se lleve todas las estatuillas. Eisenberg está bien y tiene sus momentos de lucimiento. Entre ellos está una cena en la que explota tras un exabrupto de Benji y donde dice "lo amo, y lo odio, y quiero ser él". ¿Hay más que decir? Culkin es simplemente genial. Benji es como esas una de esas personas que dicen y hacen lo que piensan, lo que sienten, sin filtro, por más errático que sea, por más incómodo. Lo hace con tal gracia y desde un lugar de que es difícil, la mayoría de las veces, verlo mal. Son esos ingredientes los que hacen que "Un dolor real" brille.
Benji y David viajan con el dolor de la pérdida de su abuela, en duelo, pero ése dista de ser su único dolor. El dolor real está en su distanciamiento, en lo que no se han dicho, pero más aún en las penas que llevan, en el equipaje que no se deja atrás cuando las maletas se han dejado; en el equipaje que sólo deja atrás cuando se desempacan los sentimientos, cuando se aclaran las dudas, cuando se enfrentan el pasado y las decisiones. "Un dolor real" habla de ello y lo hace sabiendo que la única manera de que el dolor se transforme es cómo lo hizo su propia abuela. David lo recuerda, "estaba agradecida por su lucha". "La lección de piano" lo hace a través justo de un piano, lo hace de manera más formal, más clásica. "Un dolor real" lo hace con humor porque sabe que donde hay risas deja de haber silencio y hay sanación.
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EE. UU. 2022 / 1h 30m
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