El 15 de mayo de 2010, Jessica Watson, de 16 años, se convirtió en la persona más joven en haber cruzado el Ecuador, habiendo pasado 210 días en el mar, sobrevivido a 7 volcadas y olas de 20 metros. En 2011 fue reconocida como Australiana Jovel del año. "Espíritu libre" cuenta su historia.
La película inicia con el primer y fallido intento de Jessica (Teagan Croft) por realizar el viaje. El bote tiene daños y la prensa y opiniones generales son encontradas. Hay quiénes están entuasiasmados, pero muchos otros se cuestionan si es algo que una menor de edad debiera hacer y, desde luego, si sus padres están cuerdos al permitirlo. Total que con los ánimos revueltos, Jess se lanza de nuevo al mar.
La estructura narrativa de "Espíritu libre" es de fórmula, de receta. El eje central está, desde luego, en el viaje de Jess y en ese sentido no es distinta de otras películas con travesías similares o dónde el enfrentamiento es con el mar (vienen a la mente "A la deriva", "Más allá del cielo" hasta "Una aventura extraordinaria" e "Inquebrantable"); un dato interesante que comparte es que más personas al ido a la Luna que atravezado el mar. Para darle balance, el filme alterna con el seguimiento y la compañía a distancia que realizan su familia y Ben (Cliff Curtis), a los que se agregan algunos flashback a su infancia, iniciando su entrenamiento y mostrando desde entonces su determinación. En aquél entonces, en su inocencia, parecía posible; años más tarde, en su juventud y quizás aún del todo en conciencia, lo fue.
El entorno familiar en el que se desarrolla le da mucho trasfondo emotivo a "Espíritu libre". Anna Paquin y Josh Lawson hacen a los padres, mientras que Bridget Webb, Stacy Clausen y Vivien Turner hacen a los hermanos. Stacy Clausen es una joya, tiene en sus manos el relief cómico, tiene un gran timing y es encantadora como la vocera de la familia. Teagan Croft, por su parte, está a la altura, mostrando la vulnerabilidad de Jess, pero también su determinación y recorriendo un amplio camino de emociones que incluyen depresión, desconsuelo, asombro y entusiasmo. Es agradable verla en un entorno y con un look muy distinto del de "Titans" donde hace a Rachel Roth. La verdadera Jessica Watson aparece a través de imágenes que la muestran en su retorno y navegando durante la travesía original.
"Espíritu libre" logra su cometido. El desenlace es emotivo, toca las fibras que persigue y sí, es inspirador; para lograrlo, Jessica debió empezar por vencer la dislexia. Donde queda corto es que si bien hace algunos comentarios relevantes, varios a través de diálogos (Emily le dice a su hermana, por ejemplo, "Sabes, la gente siempre tendrá opiniones sobre lo que deberías y no deberías hacer. Pero veo lo feliz que eres cuando navegas. Así que hazlo por ti" o la propia Jessica comparte en su video diario "Hay fuerza en ser uno mismo. Sabes, creo... que es tan difícil como escalar cualquier montaña. Sabes, creo que hay valentía en admitir que no estás bien"), más allá de que la determinación atraviesa muros, no suma especialmente al tema. Vaya, no es un crimen, pero es una oportunidad perdida.
Con sus detalles, "Espíritu libre", muy corta traducción, por cierto, del título original que sería "Verdadero espíritu" o "Auténtico espíritu" y que expresa la fuerza interna de Jessica, quizás no necesita hacer más o reforzar el poder de lo simple, del día. Un plus, hay que agregarlo, pues más allá de la universalidad y el eco quel sueño de Jessica tiene en el de otros, está en que es una historia real, de una mujer y de una mujer joven. Es posible y no es necesario esperar tanto para conseguirlo. En fin... Jessica lo dice bien, "no me considero una heroína. Soy una chica común que creyó en su sueño. No hay que ser especial para lograr algo así, sólo hay que tener un sueño, creer en él y trabajar muy duro" y eso es lo que es ser y tener un "verdadero espíritu".
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"True Spirit"
Australia 2023 - 1h 49m
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