“Mi nombre es Benjamín Button, y nací bajo condiciones inusuales. Mientras todos los demás envejecían, yo rejuvenecía... solo.” Benjamín Button
Lo único que tiene seguro el ser humano desde el momento de nacer es que con cada segundo que pase su cuerpo comenzará el largo e inclemente proceso de decadencia. Benjamín Button (Brad Pitt) es diferente. Nacido en el Nuevo Orleáns de 1918, Benjamín es abandonado por su padre y criado por una mujer de color en un asilo. Ahí, entre ancianos, el niño con cuerpo de viejo vivirá sus primeros años y conocerá a Daisy (Cate Blanchet), la nieta de una de las residentes, de quien se enamorará. La película cuenta su vida y el pesado camino que implica rejuvenecer.
“El curioso caso de Bejamin Button” es un caso particular. La historia, inspirada en un cuento de F. Scott Fitzgerald, estuvo dando vueltas en la industria por años. El carácter de la historia y las especificaciones técnicas eran los principales obstáculos para vencer. A principios de los 90 el proyecto estuvo a punto de ser realizado bajo la batuta de Steven Spielberg y con Tom Cruise como protagonista, años más tarde serían Ron Howard y John Travolta. Es finalmente David Fincher, más conocido por filmes de suspenso como “Se7en” (1995) y “El club de la pelea” (1999), quien lo logra con bastante buen tino.
Fincher entrega una película conmovedora y llena de corazón que se beneficia de los efectos especiales, pero cuyo peso no recae en ellos. El que se puedan ver rasgos y expresiones de Brad Pitt en los primeros años de Benjamín le brinda calidez y veracidad a la actuación. Pitt entrega un buen trabajo, aunque son sus compañeras quienes tienen los mejores momentos. Cate Blanchet y Tilda Swinton como siempre dan muestra de su talento. La sorpresa la da Taraji P. Henson, quien encarna a Queenie, la madre adoptiva de Button. La actriz de color tiene en sus manos uno de los personajes más complejos y en ningún momento titubea para interpretarlo y desplegar un impresionante rango de matices. Su trabajo la hizo merecedora a una nominación como Mejor Actriz de Reparto al Oscar, Pitt obtuvo la suya como Mejor Actor y la película fue considerada en total en trece categorías, incluyendo Mejor Película y Mejor Dirección. Aunque obtuvo tres (Mejor Maquillaje, Mejor Dirección de Arte y Mejores Efectos Visuales) y fue considerada a múltiples premios, “El curioso caso de Benjamín Button”, una historia con tintes bastante clásicos puede considerarse como la gran perdedora del año. Posiblemente sea la película más nominada y menos ganadora.
El problema de “El curioso caso de Benjamín Button” está por un lado en una excesiva duración que hace la hace pesada, y por otro en su ineludible parecido con “Forrest Gump” (1994). Eric Roth es el responsable de ambos guiones. Las similitudes son muchas y hacen preguntar qué tanto es distintivo de uno y otro filme, y claro, el primero sale beneficiado. Ahí están el romance, los hechos sociales, el abandono del padre y la entrega de la madre, el viaje para crecer, y hasta el momento de empezar a caminar por cuenta propia. Son elementos que funcionan, pero que ya no distinguen. A pesar de ello, “El curioso caso de Benjamín Button” es un espectáculo recomendable.
La vida es un suspiro y nada, nada, debe tomarse por dado. Lo único seguro es la fugacidad del tiempo y que esto que se está leyendo ahora es parte del pasado.
The Curious Case of Benjamin Button
EE.UU. 2008
Director: David Fincher.
Reparto: Brad Pitt, Cate Blanchet, Julia Ormond, Taraji P. Henson.
コメント