Sin mayores pretensiones “El chofer y la señora Daisy” es un filme que deja fuera las batallas épicas, los personajes históricos, heroicos o con algún defecto físico, para mostrar de manera sencilla el paso del tiempo y el enfrentamiento que el ser humano tiene con éste. Miss Daisy (Jessica Tandy), una mujer viuda que vive sin más compañía que la de su cocinera, se enfrenta con que ya no puede manejar más. Su hijo, Boolie (Dan Aykroyd), preocupado por ella, contrata a un hombre de color, Hoke Colburn (Morgan Freeman) como su chofer. En un principio Miss Daisy se resiste a depender de Hoke; sin embargo, al paso de los años, la relación entre ellos trasciende y se transforma en amistad.
Nominada a nueve premios de la academia (de los cuales obtuvo los de Mejor Película, Mejor Actriz, Maquillaje y Mejor Guion Adaptado), “El chofer y la señora Daisy” es considerada por muchos como una de las mejores cintas de todos los tiempos. Su acierto radica en mostrar el paso del tiempo y los cambios que deja en las personas. De una inicial lucha entre la orgullosa, obstinada y hasta “dura” Miss Daisy, y el siempre franco y confianzudo Hoke, la relación se transforma en una singular amistad donde la primera se resiste a aceptar que ya no tiene la misma energía, que ya no puede controlarlo todo y desde luego, el afecto que siente por su chofer.
Si bien la cinta deja escapar la oportunidad de tratar a fondo el tema de la discriminación hacia los negros, su director se defiende al señalar que es la forma en cómo él vio que su abuela y su chofer se relacionaban (la cinta está basada en la obra escrita por Beresford). Y tal vez tenga razón en el sentido en que a pesar de que muchos negros trabajaban como parte del servicio, en su ignorancia eran felices. Hoke no sabe leer ni escribir, una condición con la cual está cómodo hasta que se le señala. De cualquier manera, “El chofer y la señora Daisy” un memorable trabajo de Beresford (“Double Jeopardy”, 1999 y “Evelyn”, 2002) que no deja de señalar aquello inevitable, el paso de las horas y los días, sus inevitables consecuencias en nuestras capacidades, concepciones y por ende en las relaciones, dejando claro que no somos más que un instante de carne y hueso.
Driving Miss Daisy
EE.UU. 1989
Director: Bruce Beresford
Reparto: Jessica Tandy, Morgan Freeman, Dan Aykroyd, Esther Rolle.
Artículo inicialmente publicado en el periódico estudiantil “La Catarina” de la Universidad de las Américas-Puebla. Derechos Reservados de Carlos Andrés Mendiola H.
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